Ávalos Asesores

El preaviso es un mecanismo legalmente establecido que permite a trabajadores y empresarios comunicar con antelación determinadas decisiones que afectan a la relación laboral. Su finalidad es evitar perjuicios innecesarios y otorgar margen de maniobra a ambas partes. En este artículo, exploramos los casos en los que el preaviso es obligatorio, sus plazos y las posibles consecuencias de su incumplimiento.

El preaviso en el despido

En el marco de un despido, la obligatoriedad del preaviso varía según el tipo de extinción contractual:

1. Despido disciplinario

El empresario no está obligado a conceder preaviso en caso de despido disciplinario. La finalización de la relación laboral puede tener efecto inmediato desde la entrega de la carta de despido. Esto ocurre en situaciones de faltas graves como:

  • Faltas reiteradas e injustificadas de puntualidad o asistencia.
  • Indisciplina o desobediencia.
  • Abuso de confianza o fraude.
  • Embriaguez o toxicomanía en el trabajo.

2. Despido objetivo

Si el despido responde a causas objetivas (como ineptitud sobrevenida o falta de adaptación a modificaciones técnicas), el empresario debe preavisar con 15 días naturales de antelación. Durante este periodo, el trabajador tiene derecho a una licencia de 6 horas semanales retribuidas para la búsqueda de empleo.

3. Despido colectivo (ERE)

Una vez finalizado el procedimiento del despido colectivo, el empresario debe respetar el mismo plazo de 15 días naturales de preaviso para cada trabajador afectado.

Consecuencias del incumplimiento del preaviso en el despido

Si el empresario no cumple con el preaviso en los despidos objetivos o colectivos, estará obligado a abonar en el finiquito la cantidad correspondiente a los 15 días de salario. Si el pago no se realiza, el trabajador podrá reclamarlo mediante una papeleta de conciliación.

Otros casos en los que se exige preaviso

El preaviso también es obligatorio en situaciones ajenas al despido:

1. Finalización de contratos temporales

  • Si el contrato ha durado más de un año, el empresario debe preavisar 15 días antes de su finalización.
  • En contratos por obra o servicio, también se exige un preaviso de 15 días al concluir la actividad para la que el trabajador fue contratado.

2. Movilidad geográfica

Cuando el empresario decide trasladar a un trabajador a otro centro de trabajo, debe notificarlo con 30 días de antelación.

3. Modificación de condiciones esenciales del contrato

  • Si afecta a un solo trabajador, el preaviso es de 15 días.
  • Si afecta a más de un trabajador, el preaviso es de 7 días.

4. Suspensión temporal del contrato (ERTE)

En caso de un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), la empresa debe comunicarlo 15 días antes de la suspensión o reducción de jornada.

El preaviso en la baja voluntaria del trabajador

Cuando un trabajador decide cesar su actividad de manera voluntaria, también debe respetar un preaviso, cuyo plazo suele estar regulado en el convenio colectivo aplicable. En caso de incumplimiento, el empresario podrá descontar del finiquito los días no preavisados.

Conclusión

El preaviso es un elemento fundamental en las relaciones laborales, ya que permite a ambas partes prepararse ante un cambio significativo. Tanto el trabajador como el empresario deben conocer sus derechos y obligaciones para evitar conflictos y posibles perjuicios económicos. En Avalos Asesores, ofrecemos asesoramiento especializado para que empresas y trabajadores gestionen correctamente estas situaciones. ¡Consúltanos!